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El PRÍNCIPE DE MAQUIAVELO

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PRÍNCIPE 1ª
Capítulo I
Capítulo II
Capítulo III
Capítulo IV
Capítulo V
Capítulo VI
Capítulo VII
Capítulo VIII
Capítulo IX
Capítulo X
Capítulo XI

PRÍNCIPE

Capítulo XII
Capítulo XIII
Capítulo XIV

PRÍNCIPE 3º
Capítulo XV
Capítulo XVI
Capítulo XVII
Capítulo XVIII
Capítulo XIX
Capítulo XX
Capítulo XXI
Capítulo XXII
Capítulo XXIII

PRÍNCIPE 4ª
Capítulo XXIV
Capítulo XXV
Capítulo XXVI

ACTIVIDADES
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EVALUACIÓN
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Nicolas Maquiavelo

Maquiavelo redactó el Príncipe de un sólo golpe entre agosto y diciembre de 1513 a partir de sus lecturas y de su larga experiencia personal . En la obra se distinguen cuatro partes fundamentales:

  1. Capítulos I-XI: Maquiavelo estudia aquí las diferentes clases de principados, cómo se adquieren y se conservan. Trás una rápida mención de los principados hereditarios ( capítulo II ), se centra en el estudio de lo que denomina como principados nuevos, abordando primeramente el llamado principado mixto ( capítulos III-V ). De todos modos, la preocupación esencial de Maquiavelo es examinar los principados totalmente nuevos ( en donde es nuevo tanto el príncipe como la organización política en la que sustenta su principado ) junto con las diferentes formas de acceso a los mismos y los problemas generales que plantea su conservación ( capítulos VI-IX ). Trás una primera consideración sobre las fuerzas de los principados ( capítulo X ) finaliza la primera parte haciendo referencia al principado eclesiástico ( capítulo XI ) donde resalta su desprecio por la política temporal de la Iglesia.

  2. Capítulos XII-XIV: Maquiavelo aborda en esta segunda parte el problema de la seguridad y la armas: un Estado sólo es libre y seguro si dispone de un ejercito propio bien organizado sobre la base del reclutamiento del ciudadano; un príncipe sólo puede mantenerse si dispone de armas propias y él mismo está al frente del ejército y de la política militar. Por la misma razón, las armas mercenarias y auxiliares muestran la dependencia y la debilidad de dicho Estado, y a la larga la necesaria conquista por quien, de hecho, tiene la fuerza.

  3. Capítulos XV-XXIII: Maquiavelo pasa a estudiar en esta 3ª parte cuál debe ser el comportamiento y el gobierno de un príncipe con respecto a sus súbditos y amigos. En este contexto, abandonando el fácil recurso de la imaginación, Maquiavelo, desarrolla los principios de una política rigurosamente realista, partiendo de lo que las cosas realmente son y han sido y serán siempre ( no lo que deberían ser ), pues la política debe basarse en lo que la naturaleza y pasiones humanas son inevitablemente: maldad, volubilidad, ingratitud, ambición, envidia. Un Príncipe ( el Estado ) debe basarse en sí mismo: la ley, por un lado, y la astucia y la fuerza por otro ( capítulo XVIII ), disfrazado -porque lo obliga la situación- sus a primera vista injustas, inmorales e irreligiosas acciones porque la política para la generalidad es el reino de las apariencias, ya que todos ven lo que pareces, pero pocos palpan lo que eres. Por ello, se ha de ser consciente de que es inevitable y necesario pecar a veces para conservar el Estado y la libertad, pero se ha de procurar por todos los medios no incurrir en el odio y en el desprecio del pueblo, porque éstos son los males o vicios que hacen perder el Estado ( capítulo XIX ). El príncipe debe ganar el consentimiento a su dominación: la mejor fortaleza es no ser odiado por el pueblo, porque por muchas fortalezas que tengas, si el pueblo te odia, no te salvarán. ( capítulo XX ).

  4. Capítulos XXIV-XXVI: A partir de estos capítulos, Maquiavelo, estudia la situación contemporanea de la Italia de su época, volviendo al objeto central de sus preocupaciones: las causas de la ruina de Italia y la posibilidad de una regeneración que permita recuperar la libertad y ordenar un Estado moderno y eficaz como forma de convivencia (de vivere civile). Se trata por tanto, de analizar la posibilidad de la regeneración política de Italia. En el capítulo XXIV se expone la causa del hundimiento italiano; en el capítulo siguiente se debate el lugar que en el curso político corresponde a la virtud y a la fortuna, con el fin de refutar  a quienes desean disfrazar su incapacidad e ignorancia en la presunta omnipotencia de la fortuna; con el fín de demostrar que la virtud y la audacia tienen un lugar muy importante en el desarrollo y conclusión de la lucha política. Trás todo esto, Maquiavelo, exhorta a final a la acción virtuosa y capaz que lleve a Italia a infundir en la materia una nueva forma mediante un orden nuevo. No es, por tanto, el Príncipe ni el realismo de Maquiavelo un mero pragmatismo anclado en la reproducción de lo existente, limitado al ámbito del ser; su realismo es la base fundamental del que se ha de partir para pasar del ser al deber ser. En este contexto el objeto principal de su atención es el principado totalmente nuevo por lo que su obra se orienta desde el principio hacia el estudio de esa variante, obviando - aunque haciendo referencia a ellos - los principados hereditarios y mixtos. Su interés se centra, por tanto, en el principado nuevo del cual, Maquiavelo, ve un modelo contemporaneo del mismo en la figura de Cesar Borgia.