TEXTOS SOBRE MELISO
Sobre la vida de Meliso

Meliso de Samos, hijo de Itágenes. Fue discípulo de Parménides...Fue tambien un político y alcanzó una gran consideración entre sus conciudadanos: nombrado por ello comandante de la flota, logró una mayor admiración aún por su valor personal....Apolodoro dice que alcanzó su plenitud en la Olimpíada  84.
Diógenes Laercio, IX 24

Meliso
















































































































































































































































































































TEXTOS SOBRE MELISO
Meliso participe en una batalla naval

Cuando Pericles se hizo a la mar, Meliso, hijo de Itágenes, un filósofo al frente entonces de (la armada samia), Samos, bien por desprecio del corto número de naves de los atenienses o la inexperiencia de sus jefes, convenció a los samios de que atacaran a los atenienses. Tuvo lugar una batalla en la que vencieron los samios. Les capturaron tantos prisioneros y destruyeron tantas naves que ejercieron el dominio del mar y destinaron a la continuación de la guerra tal cantidad de provisiones como nunca jamás antes tuvieron. Aristóteles dice que incluso el mismo Pericles fue derrotado por Meliso en un combate naval anterior.
Plutarco, Pericles 26
Meliso























































































































































































































































































































































TEXTOS SOBRE MELISO
Lo uno es infinito

Puesto que no nació, es ahora, fue siempre y siempre será y no tiene principio ni fin, sino que es infinito. Pues, si hubiera nacido, tendría principio (ya que habría empezado a nacer alguna vez) y fin (pues habría dejado de nacer alguna vez); pero, ya que ni comenzó ni acabó, fue siempre y siempre será y no tiene principio ni fin; pues es imposible que exista para siempre lo que no existe todo en su totalidad.
Simplicio, Física. 29, 22 y 109, 20

Sino que como existe siempre, de la misma manera también es necesario que sea infinito en magnitud.
Fr. 3, ibid. 109, 31

Nada que tiene un principio y un fin es eterno ni infinito.
Fr. 4, ibid. 110, 3

Si no fuera uno, estaría limitado por alguna otra cosa
Fr. 5, ibid. 110, 5

Porque si lo fuera (infinito), sería uno; si fueran dos, no podrían ser infinitos, sino que se limitarían el uno al otro.
Fr. 6, Simplicio, de caelo 557, 16
Meliso























































































































































































































































































































































 

TEXTOS SOBRE MELISO
Opinión de Vlastos

Vlastos se pregunta: ¿cómo pudo afirmar que lo uno es incorporeo si es infinito en magnitud?
RESPUESTA
No se puede olvidar que es muy posible que Meliso interpretara la mencionada infinitud en el sentido de duración carente de principio y de fín y no en el sentido de una extensión espacial ilimitada.
Meliso























































































































































































































































































































































TEXTOS SOBRE MELISO
Pasajes de Aristóteles

Dicen que el universo es uno e inmovil, y algunos que es tambien infinito; pues su límite lo limitaría frente al vacío.
Aristóteles, de gen. et corr. A 8, 325 a 14

Hay quienes creen que es evidente que existe el vacío, debido a la existencia de lo raro y de lo denso. Pues si no existe lo raro y lo denso, no es posible que las cosas se contraigan y compriman. Y si no aconteciera esto, o no existiría el movimiento en absoluto, o el universo se agitaría, como dijo Juto.
Aristóteles, Física 9, 216 b 22

Pues, como dicen tambien los pitagóricos, el mundo y todo lo que en él hay está definido por el número tres; ya que el comienzo, el medio y el fin dan el número del mundo, y éstos el de la tríada.
Aristóteles, de caelo A 1, 268 a 10
Meliso























































































































































































































































































































































TEXTOS SOBRE MELISO
Lo uno es incorporeo

La teoría de que existe el vacio implica, una vez más, la existencia del espacio; pues se podría definir el vacío como el espacio arrebatado a los cuerpos.
Aristóteles, Física 1, 208 b 25

(Dijo que) el todo es eterno...y homogéneo y que no tiene espacio en su interior.
Hipólito, Ref. I 11, 2

Pues evidenció que quiere decir que lo que existe es incorpóreo cuando escribió: si el Ente es, debe ser uno y, al ser uno, no debe tener cuerpo. Si tuviera volumen, tendría partes y ya no sería lo uno.
Simplicio, Física 109, 34
Meliso























































































































































































































































































































































TEXTOS SOBRE MELISO
Meliso prefigura a los atomistas

Este argumento, pues, es la prueba más poderosa de que sólo existe lo uno; pero también son pruebas las siguientes: si, en efecto, existiera una pluralidad, cada ser plural tendría que ser como es mi descripción de la uno. Pues si existe la tierra y el agua, y el aire y el fuego, el hierro y el oro, si unos seres están vivos y otros muertos, si unas cosas son negras y blancas y son ciertas cuantas cosas afirman los hombres, si todo es así y nosotros vemos y oímos rectamente, es necesario que cada una de estas cosas sea tal cual antes dijimos y que no cambien ni se alteren, sino que cada una sea siempre precisamente lo que es. Ahora bien, afirmamos que vemos, oimos y comprendemos rectamente y, sin embargo, creemos que lo caliente se convierte en frío y lo frío en caliente, lo duro en blando y lo blando en duro, que el ser vivo muere y que nace del que no tiene vida; que todas estas cosas cambian y que lo que fueron y lo que ahora son no se parecen en nada. Creemos que el hierro, que es duro, se desgasta por el contacto de los dedos y que lo mismo acontece con el oro, la piedra y todo los que nos parece que es duro y que la tierra y la piedra se forman del agua; de tal manera que ni vemos ni conocemos los seres reales. Ahora bien, estos hechos no concuerdan entre sí, ya que, tras haber dicho que había muchas cosas que eran eternas y que tenían formas y fuerza propias, creemos que experimentan alteración y que cambian de lo que vemos en cada instante. Es evidente, pues, que no vemos rectamente y que no tenemos razón al creer que todas estas cosas son plurales. No cambiarían si fueran reales, sino que cada una sería lo que creemos que es, ya que nada es más fuerte que la verdadera realidad. Pero si resulta que han cambiado, lo que es ha perecido y lo que no es ha llegado al ser. En consecuencia, si hubiera una pluralidad, las cosas deberían ser tales cual es precisamente la naturaleza de lo uno.
Fr. 8, Simplicio, de caelo 558, 21

Meliso