Aristóteles entiende la Justicia desde varios puntos de vista:
Como sinónimo de lo legal ( Justicia Política ).
Cómo sinónimo de lo equitativo ( Justicia Particular ).
Como sinónimo de lo legal, Aristóteles, define a la justicia como algo
universal ( Justicia Política ) ya que ser justo equivale a obedecer a la ley. En este sentido, todo ser
humano que vive en la Ciudad o Estado debería cumplir las leyes de su
ciudad para ser así justo. No se debe olvidar que la concepción griega de
la Polis ( Ciudad-Estado ), de la que Aristóteles aún es deudor, implica que
ésta actúa como agente pedagógico del hombre con el objeto de hacer de él
un buen ciudadano. En definitiva, según esta concepción, el Estado es la
sede de la virtud por excelencia, es decir, de la justicia.
Como sinónimo de lo equitativo, Aristóteles, define la justicia como
algo particular y la divide en: 1) Distributiva. 2) Correctiva. 3)
De reciprocidad. La justicia distributiva es aquella mediante la cual se
intenta repartir los bienes de una comunidad de un modo proporcional. Aristóteles
piensa que en tal distribución deberían tenerse en cuenta los méritos de
cada uno. La justicia correctiva se subdivide en justicia que se ocupa de
las transacciones voluntarias (derecho civil) y la justicia que se ocupa de
las involuntarias o forzosas (derecho penal). Por último, la justicia de
reciprocidad o conmutativa hace referencia a los tratos llevados a cabo en el ámbito
comercial y económico.