LIBRO II ENSAYO SOBRE EL ENTENDIMIENTO HUMANO
CAPÍTULO IX
Acerca de la Percepción
{Resumen-Comentario}
- Locke identifica la percepción con la capacidad de pensar. Y es que
según Locke, pensar no consiste en otra cosa que en ser consciente de que
se tiene ideas. Ahora bien, tales ideas surgen cuando la mente PERCIBE
algún tipo tipo de sensación (ideas de sensación) o reflexiona sobre sus
propias operaciones (ideas de reflexión). En este contexto, señala que
cualquier alteración que experimenta el cuerpo pero que no llega a la
mente, es decir, que no es percibida por el sujeto, no puede decirse que tal
sujeto esté pensando. Por todo ello, señala Locke, el fuego podría
abrasar nuestros cuerpos sin que produzca en nosotros más efecto que sobre
un trozo de madera, a menos que el movimiento se continúa hasta llegar al
cerebro, y que allí se produzca la sensación de calor o la idea de dolor,
que es en lo que consiste percibir, es decir, pensar. De esta manera,
siempre que se produce una percepción es que s ha producido también alguna
idea presenten en el entendimiento o capacidad de pensar o percibir. {Texto9a}
- Locke afirma que, sin embargo, las ideas percibidas por la
sensación pueden ser alteradas a través del JUICIO
cuando, debido al hábito y a la costumbre, no se actúa en consonancia con
la sensación real que se percibe. Por ejemplo, muchas personas que, por
problemas con la luz, adquieren la costumbre de taparse continuamente los
ojos con los párpados lo sigue haciendo también cuando se encuentran a
oscuras, es decir cuando la sensación exigiría otro tipo de idea y de
comportamiento. Ahora bien, ello no invalida el principio de que las
sensaciones son la causa de las percepciones, aunque no resulta extraño que
nuestra mente cambie con frecuencia la idea de sus sensaciones por otra de
su juicio. {Texto9b}
- Según Locke, la facultad de la percepción es la que marca la DIFERENCIA
entre el reino animal y los seres inferiores de la naturaleza. Así,
por ejemplo, lo vegetales, aunque poseen cierto grado de movimiento,
éste es mero mecanicismo y no es muy diferente al que se produce cuando la
barba de la avena selvática se riza o cuando un nudo mojado se acorta. Es
evidente que todos estos movimientos se llevan a cabo sin ninguna sensación
por parte de tales sujetos. Por su parte, en los animales parece
encontrarse, en todos ellos, la facultad de la percepción, aunque en grados
muy distintos. Así, por ejemplo, el grado de percepción en una ostra o una
almeja es muy pequeña. Pero lo cierto es que tampoco la necesitan para su
supervivencia: ¿qué beneficio, se pregunta Locke, le podría suponer la
vista o el oído a una criatura que no puede moverse hacia los objetos que
les pueden ser de provecho, ni alejarse de los que le puede producir un
perjuicio? Tales animales, por tanto, poseen alguna pequeña percepción
(suficiente para su supervivencia) que los diferencian de los seres con
absoluta insensibilidad. {Texto9c}
- En definitiva, según Locke, la percepción representa el PRIMER
PASO hacia el pensamiento. Cuando menos sea en un ser la capacidad de
percibir, más lejos se estará del conocimiento propiamente humano. Por
consiguiente, puede decirse que la percepción es la primera operación de
nuestras facultades intelectuales y la vía de acceso a todo conocimiento
para nuestra mente. También podría decirse que es quien establece la
frontera entre los animales y las especies inferiores de las criaturas. {Texto9d}
Capitulo IX
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