Extranjero. -Por consiguiente, puesto que el discurso es verdadero o falso, y puesto que el pensamiento es como el diálogo del alma consigo misma, el juicio, el término del pensamiento, y la imaginación, de que hablábamos antes, mezcla de la opinión y de la sensación, todas estas diversas operaciones, a causa de su parentesco con el discurso, han de ser también, a veces, falsas, por lo menos alguna de ellas.
Teetetes.-Nada más cierto.
Extranjero. -Ya ves que hemos descubierto el falso juicio y el falso discurso, más pronto de lo que suponíamos, a causa de la creencia, en que estábamos, de que esta indagación era superior a nuestras fuerzas.
Teetetes.
-Ya lo veo.