Como el dios quería que todas las cosas fueran buenas y no
hubiera en lo posible nada malo, tomó todo cuanto es visible, que se movía sin
reposo de manera caótica y desordenada, y lo condujo del desorden al orden,
porque pensó que éste es en todo sentido mejor que aquél. Pues al óptimo sólo
le estaba y le está permitido hacer lo más bello.
Platón.
Timeo