LIBRO IV ENSAYO SOBRE EL ENTENDIMIENTO
HUMANO
CAPÍTULO VIII
Acerca de las proposiciones frívolas
{Resumen - Comentario}
- Locke define como PROPOSICIONES FRÍVOLAS a todas
aquellas que, aunque sean ciertamente verdaderas, sin embargo, no aportan
ninguna luz a nuestro entendimiento, y, para nada, aumentan nuestro
conocimiento. Afirma que entran dentro de esta categoría todas las proposiciones de IDENTIDAD
ya que, por mucha importancia que quieran darse, nada nos enseñan que no
hubiéramos conocido ya antes. Y es que cuando alguien afirma: lo que es,
es, lo que está realmente diciendo es que, por ejemplo, un alma es
un alma, o un espíritu es un espíritu, etc. Pero, se pregunta
Locke, ¿qué es esto sino jugar con las palabras? Sucede lo mismo que si un
mono se pasara una ostra de una mano a otra y, si tuviera la posibilidad de
hablar, dijera: la ostra en la mano derecha es el sujeto, y la ostra
en la mano izquierda es el predicado; con lo que se estaría
formulando una proposición sobre la ostra evidente por sí misma, es decir,
la ostra es la ostra. El problema es que con tal proposición no se
estaría aumentando un ápice nuestro conocimiento. Por todo ello, afirma
Locke, tales proposiciones pueden ser tildadas de FRÍVOLAS
ya que se pretenden utilizar como principio de instrucción y, en la
realidad, no nos enseñan absolutamente nada. {Texto 8a}
- Locke diferencia entre proposiciones frívolas y proposiciones que INSTRUYEN.
Éstas, en vez de afirmar el mismo término de si mismo, como hacen las
proposiciones de identidad, son puestas en orden por el entendimiento con el
objeto de percibir el acuerdo o desacuerdo entre las ideas. Por el contrario
con las proposiciones frívolas sucede lo mismo que con aquellos niños que
intentaran aprender a leer sabiendo únicamente que la A es una A o
la B es una B. Parece evidente que podrían saber esto muy bien y, si
embargo, no por ello, sabrían leer. {Texto 8b}
- Además de las proposiciones de identidad existen otras DOS
CLASES de proposiciones que también son frívolas. Las primeras son
aquellas en donde el género se predica en la especie. Por ejemplo, si
alguien afirma: todo hombre es un ser vivo, no estaría
ofreciendo información que aumentara nuestro conocimiento ya que todas las
ideas simples que forman la idea compleja significada por el término ser
vivo no son otra cosa que lo que ya antes se comprendía con el nombre de
hombre. Las segundas consisten en afirmar una de las ideas simples de la que
está formada toda una idea compleja. Por ejemplo, si alguien afirma que el
oro es fusible; ¿qué información puede aportar decirle a alguien lo
que se supone que ya sabía? Y es que si alguien sabe que el nombre oro
significa la idea compleja de un cuerpo amarillo, pesado y fusible, no le
servirá de mucha información el que que alguien le diga que el oro es
fusible. Semejantes proposiciones quiere hacer pasar por algo nuevo lo que
sólo es la definición de sus propios términos. {Texto 8c}
- Locke piensa que la mayoría de los LIBROS DE METAFÍSICA
expresan proposiciones que revelan una gran frivolidad. Y es que con sus
pretendidos razonamientos no hacen más que deducir unas proposiciones a
partir de otras pero sin que ello implique que tales proposiciones tengan
una realidad objetiva lo que imposibilita avanzar ni un peldaño en el
conocimiento de la verdad de las cosas. Podría decirse - como más adelante
Kant afirmará -que son meras tautologías. Sucedería lo mismo (Locke hace
referencia aquí a un ejemplo que Kant también utilizará en su
crítica al argumento ontológico cuando nos habla de comerciante que se
cree más rico porque suma números mentales en su cabeza) que un hombre que
se cree opulento porque toma unas bolsas de monedas a las que da el nombre
de libras, chelines y peniques. Es evidente que puede llegar a conseguir una
gran suma sin que, por ello, llegue a ser ni un ápice más rico. {Texto
8d}
- Otra clase de proposiciones frívolas son aquellas que utilizan PREDICADOS
EN ABSTRACTO. Así, por ejemplo, aquellos que afirman que la
parsimonia es la frugalidad, la gratitud es la justicia, que tal acción es
o no templanza, no son más que proposiciones frívolas ya que si se
analizan detenidamente se podrá comprobar que esos dos nombres significan
la misma idea. {Texto 8e}
Capítulo VIII
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