INTRODUCIÓN
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Dialéctica lógica de la
ilusión
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Entendimiento y Razón
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Silogismos
dialécticos
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Ideas en
general
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Ideas
trascendetales
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Antes
hemos llamado dialéctica a la lógica de la ilusión. Esto no significa
que sea una doctrina de la probabilidad, ya que ésta es verdad, si bien
una verdad conocida por medio de razones insuficientes; por eso tal
conocimiento (probable) es defectuoso pero no falaz. Muchos menos se debe
tomar el fenómeno y la ilusión como idénticos, ni la verdad ni la
ilusión se hallan en el objeto en cuanto intuido, sino en el juicio sobre
éste en cuanto pensado. Los sentidos no se equivocan, pero no porque
juzgen incorrectamente, sino porque no juzgan en absoluto. La verdad y el
error sólo pueden hallarse en el juicio, es decir, en la relación del
objeto con nuestro entendimiento. El entendimiento por sí solo (sin el
influjo de otra causa) ni los sentidos por sí mismos, se equivocan. Como
no tenemos más que esas dos fuentes de conocimiento, llegamos a la
conclusión de que el error sólo es producido por el inadvertido influjo
de la sensibilidad sobre el entendimiento.
Nuestra tarea presente no es tratar de la ilusión
empírica (por ejemplo, la ilusión óptica) a través de la cual el
juicio es desviado por influjo de la imaginación. Nos ocupamos de la
ilusión trascendental, que influye en principios cuyo uso ni siquiera se
basa en la experiencia y nos lleva más allá del uso empírico de las
categorías. Llamaremos inmanentes a los principios cuya aplicación se
circunscribe totalmente a los límites de la experiencia posible.
Denominaremos trascendentes a los principios que sobrepasan esos límites.
No entiendo por estos principios el uso trascendental o abuso de las
categorías, que es un simple error del juicio. Entiendo por verdaderos
principios trascendentes aquellos que nos incitan a derribar todos los
postes fronterizos y a adjudicarnos un terreno nuevo. Por ello,
trascendental no es lo mismo que trascendente. Un principio que elimine
todo límite, que ordene incluso sobrepasarlo, se llama
trascendente.
La ilusión trascendental no cesa aunque se halla
comprendido claramente su nulidad a través de la crítica trascendental.
Se trata de una ilusión inevitable, tan inevitable como que la luna le
parezca al mismo astrónomo mayor a la salida, por más que él no se deje
engañar por tal ilusión. La dialéctica trascendental se conformará con
detectar la ilusión de los juicios trascendentes pero nunca podrá lograr
que desaparezca. Hay una natural e inevitable dialéctica de la razón
pura que ni siquiera, despues de descubierto el espejismo, dejará sus
pretensiones de engaño. Divideremos la dialéctica trascendental en dos
partes: la primera tratará de los conceptos trascendentales de la razón
pura; la segunda se ocupará de los silogísmos trascendentes y
dialécticos.
Kant. Critica de la razón pura. Dialéctica
trascendental
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